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Relleno graso. Lipoestructura
Casos Reales
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La utilización de grasa para tratar ausencias de volumen se viene haciendo desde principios del siglo pasado, sin embargo el hecho de que tras su aplicación se reabsorbiese y desapareciera esta grasa en un porcentaje alto y variable hizo que fuera una técnica poco utilizada dada la inconsistencia de sus resultados.
La situación cambió con el desarrollo de las técnicas de lipoestructura, donde tras la extracción de grasa de una forma sistematizada y perfectamente reproducible, esta grasa se procesa y purifica para, posteriormente, ser reinyectada con una técnica precisa y muy específica en las zonas deseadas. Con ello se consiguen aumentos de volumen permanentes, y lo que es más importante con resultados consistentes utilizando material del propio paciente.
Las ventajas son obvias al disponer de un material maleable, perfectamente tolerado por nuestro organismo (al formar parte de él), que una vez prendido se comporta como el resto de los tejidos (estabilizado, engordando ó adelgazando según las fluctuaciones del peso), exento de todos los posibles riesgos que conllevan los materiales de rellenos sintéticos ó de origen animal no propio del paciente, y prácticamente ilimitado dado que la grasa viene a representar un treinta por ciento de nuestro tejido.
La lipoestructura permite aportar volumen en un área corporal tras extraer grasa de otra zona mediante una técnica de microliposucción (lo que implica muchas ocasiones un beneficio extra). Debe saber que para que el resultado sea permanente es aconsejable, aunque no siempre sea necesario, efectuar la técnica en 2 tiempos con un intervalo de unos 6 meses, buscando alcanzar un relleno adecuado y una simetría óptima.
Las indicaciones son claras: aportar volumen en esas zonas corporales donde falta, ya sea por una causa congénita, tras un accidente ó traumatismo, o secundaria al envejecimiento. Las zonas donde se puede aplicar son todas las corporales aunque, quizás por su efecto de reposición de volumen se haya popularizado especialmente en cara (especialmente pómulos, reborde mandibular y mentón), manos y nalgas.
La lipoestructura es una técnica quirúrgica específica que se puede efectuar sola o asociada a otras intervenciones como por ejemplo: liposucción amplia, cirugía facial del tipo del lifting o la blefaroplastia, o cirugía de cicatrices.
Ahora bien, debe de saber que cada situación y cada paciente son diferentes, por ello si está considerando someterse a este tratamiento, este texto puede servirle solo como orientación dado que actualmente no existe un tipo universal de tratamiento, sino que cada intervención se diseña para cada persona dependiendo de las características individuales, por lo cual será siempre su cirujano el que le debe de aconsejar personalmente e indicarle cuáles son sus posibilidades reales y qué limitaciones existen.
Paciente ideal
El candidato ideal es aquel que busca la mejoría de su aspecto, no la perfección de su imagen dado que ésta no es posible
La lipoestructura aporta volumen en una área corporal específica, buscando alcanzar o recuperar la armonía en la forma ya sea facial ó corporal. Además este volumen, conlleva, en muchas ocasiones una mejoría del aspecto de la piel.
Por ello el candidato ideal es aquel que busca la mejoría de su aspecto, no la perfección de su imagen dado que ésta no es posible, y que es consciente de las ventajas, limitaciones y riesgos que conlleva.
Además debe gozar de buen estado físico y es fundamental la estabilidad psicológica.
Preparación
Cuando acuda a la consulta, su cirujano le estudiará y le informará de todas las ventajas y riesgos. También le pedirá un estudio preoperatorio una vez hayan determinado la fecha de intervención.
Se le dará una serie de instrucciones como las siguientes entre otras:
- No debe tomar aspirinas o antiinflamatorios ni vitamina E desde 10 días antes de la intervención, ya que ello puede favorecer el sangrado.
- No debe fumar desde 30 días antes de la cirugía.
- No beber alcohol desde 24 horas antes ni hacer comidas copiosas.
- Mantener la dieta absoluta desde la hora recomendada.
- La lipoestructura puede efectuarse de forma ambulatoria o con un ingreso hospitalario de 12 a 24 horas, el tiempo de estancia dependerá del volumen que vayamos a aportar, y de que sea una única técnica o se asocie a otras.
Técnica quirúrgica
No existe una técnica determinada ya que no hay dos situaciones iguales por lo que la técnica se adapta a cada caso. Ahora bien, debe de saber que se pueden tratar diversas zonas faciales (frente, párpados, pómulos, labios, reborde mandibular o mentón) y corporales (tórax, manos, nalgas, muslos.. etc).
La extracción de grasa se hace aplicando una técnica de microliposucción tumescente con microincisiones, utilizando como zona donante en función del volumen necesario diversas áreas corporales como el cuello, abdomen o trocánteres.
La lipoestructura es procedimiento quirúrgico que se debe realizar en quirófano y con una anestesia adecuada. La anestesia que se requiere suele ser anestesia local sola o con sedación aunque en ocasiones se empleará anestesia general si la zona a tratar es muy amplia o si se asocia a otros procedimientos quirúrgicos.
También a través de unas microincisiones de unos 2 mm. de tamaño se inyecta esa grasa procesada en las zonas deseadas.
Una vez operada podrá marchar a su domicilio o bien pasar 12 ó 24 horas en el centro hospitalario, dependiendo de su caso clínico.
Riesgos
Cualquier tipo de actividad quirúrgica entraña un riesgo inherente. La decisión individual de someterse a una intervención se basa en la comparación del riesgo con el beneficio potencial. Usted con la ayuda del cirujano deberá sopesar las ventajas y desventajas de ello, la repercusión de su problema en su vida habitual y el beneficio que obtendría en caso de ser operado/a.
Se le entregará un consentimiento informado que deberá presentar firmado en la consulta siguiente. Deberá leerlo antes con detenimiento y comentar con su cirujano las dudas que tenga.
Aunque la mayoría de los pacientes no experimentan complicaciones, usted debería discutir cada una de las que vienen mencionadas en el consentimiento informado con su cirujano plástico para asegurarse que comprende los riesgos, complicaciones potenciales y consecuencias de la técnica de lipoestructura.
Después de la intervención
No es una intervención que resulte dolorosa aunque sí es algo aparatosa, dado que se tocan dos zonas corporales, la donante de grasa de donde se extrae y la zona receptora donde se va a recolocar.
Habitualmente con los medicamentos analgésicos que se le recetarán suele ser suficiente.
En el postoperatorio lo más llamativo será el edema y los hematomas que aparecerán en la zona infiltrada. Para disminuirlos se aplicará frío varias veces al día, y guardará reposo relativo, procurando que la zona infiltrada este ligeramente elevada para que el edema desaparezca antes.
Entre la 1ª y la 2ª semana el edema habrá disminuido lo suficiente para retomar su vida social y laboral si la zona tratada fuera visible (cara ó manos), aunque el hinchazón persistirá hasta 2-3 meses dependiendo de cada caso.
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